Well, well, well… Ya les hablé de las únicas cuatro bodas a las que me han querido invitar porque son los únicos que sí saben cómo me pongo, pero igual decidieron correr el riesgo. Héroes sin capa, realmente. Pero es momento de hablar del funeral. Y no, nadie murió. Aunque alguna vez Radhika me dijo que there are worse fates than death, y precisamente éste es uno de esos casos. Coincidentalmente también la involucra a ella. Dior obra de maneras misteriosas y así.
Pues Radhika se casó literalmente el mismo día que Leena y, pues, sí era mi mejor amiga y así, pero pues era una decisión muy difícil. OK, mentira total. Por un lado era la boda de Radhika en Montreal con su esposo que es de huevísima y encima en domingo. Por otro lado, era la boda de Leena en Croacia, con una villa en el Mediterráneo por una semana. I mean, a quien le den pan, que llore. Obviamente decidí ir a Croacia.
Pues esa decisión efectivamente mató mi amistad con Radhika, which kinda sucks, pero igual ya tenía los días contados. Pero antes de que mi amistad con ella muriese – básicamente cuando aún no le decía que no iba a ir a su boda – los acompañé a su bachelor y bachelorette party en Vegas. Vengo cayendo en cuenta que ‘Vegas’ rima con ‘vergas’, y la neta es por algo. Yo la sentí oscura y tenebrosa y eso que nada más fue un finde largo.
Al evento fuimos un montón de randos que no conocía, pero tres días was enough para no quererlos conocer más. De que las tres cuartas partes eran familiares de ellos y después unos cuantos randos. De que yo era lo mejorcito ahí, imagínense cómo estaba la calidad de la melcocha. Obviamente de lo más terrorífico de ese grupo era Anelise, y no lo digo porque no me haya dado gusto verla, porque Dior sabe que mi hígado la odia, pero yo la amo. Lo digo porque era su primer viaje sin hijos desde que los tuvo y la vieja tenía mucho hoeness reprimido que quería sacar conmigo. Girl, tipo yo no tengo hijos, yo he vivido mis hoe days como era debido. No tengo alma ya para recuperar cuatro años de putería en tres días. Obviamente no le dije eso, en cambio le ofrecí compartir cuarto porque estoy bien pendejo es mi bestie. Pues básicamente me subí al avión sabiendo que iba a valer madre.
Después de un vuelo mega retrasado, por fin llegué a Vegas y procedí a tirarme al pedo con Anelise. Al día siguiente fuimos a la alberca y ahí conocimos a todo el crew. Mucho irrelevante, excepto por quienes serían las dos hoes que me darían de que hablar todo el fin de semana y, francamente, aquí estoy dos años después. So it was good.
La primera de ellas era Isabelle, que es la bestie del novio, pero además lo único que sé de ella es que es mucho mayor que todos nosotros, que está medio pendeja, que está soltera, y que tiene herpes (muy probablemente la consecuencia de estar medio pendeja, y la razón del porqué está soltera). Casi poética la situación. Lo único relevante de ella, además de quererse coger a todo mundo unsuccessfully, fue que su estatus era un secreto.
Side note, pero si quería mantener que tiene herpes en secreto, tal vez lo mejor no era contarle a Radhika (porque ella me contó a mí, obvio).
Ella, once again, estando medio pendeja y queriendo hacer lo posible para dejar de estar soltera, le empezó a tirar el pedo a Yannick, empleado de Adam y Radhika que se la pasa sugiriéndoles hacer un trío con él. Pues en un momento le dice:
Isabelle: So what would you rather? Catch Covid or herpes?
Yannick, sin pensarlo un solo segundo: Covid, fuck herpes.
Yo no sé qué esperaba Isabelle, pero yo me cagué de risa machín. Eso no la detuvo de tratar de ofrecérsele a todo el mundo, pero no le salió hasta donde supe.
Del otro lado estaba Ragini, prima de la novia, y simplemente icónica. She’s an icon, she’s a legend, and she is the moment, o como vaya esa frase. De que iba sin marido y la vieja le andaba pisteando durísimo desde muy temprano. Después me enteré que de hecho es alcohólica. No alcohólica fresa, tipo yo, sino alcohólica de que 12 steps y la chingada. Creo que la única razón por la que literal no está recluída en AA es porque su problema con la bebida de anónimo no tiene nada. Para nada es queja.
O sea, sí ando diciendo que Ragini era alcohólica y la chingada, pero la realidad de las cosas es que todos estábamos igual de pedos que ella desde las 10 de la mañana. Pero miren, yo ya tengo muchas etiquetas en la espalda, así que le voy a echar la culpa de mi cirrosis fulminante a ella. Lo más cagado del asunto es que no nada más era una alcohólica y ya, sino que además también andaba caliente todo el pinche día. Onda se le ofrecía a todo mundo y todo mundo le decía que qué bonito, pero que siempre no, gracias.
Pero eso la detuvo? Por supuesto que no.
No sé cómo se enteró que había una piscina exclusivamente para andar encuerados adultos y ahí vamos Anelise y yo a acompañarla porque la verdad a mí me encanta el chisme, y Ane necesitaba recordar lo que era estar soltera y sin hijos. Llegamos a la psicina y un pinche cadenero me sale con la mamada de que ellas pasan gratis pero yo debía pagar como 50 dólares o una madre así. No way, Jose. De que no hay manera de que yo voy a pagar nada más para ver teclas. A mí ni me gustan. Yo ya me iba a la habitación porque eran las 15h y ya había sido mucho pedo, pero Dior no es tan misericordioso.
Ragini: Let him through for free.
Bouncer: Nope.
Ragini: *le flashea la tecla izquierda*
Bouncer: Oh, wow. OK, half price.
Oh no, he didn’t! Jajaja, Ragini pensó que me iban a dejar pasar gratis por haberle mostrado un seno. Apreció el sentimiento, la verdad. El problema es que esperaba dejar tartamudo al tipo, y el tipo apenas y parpadeó. Debo admitir que, si algo le admiro a esta tipa, además de ser tan huila, es que no se da por vencida. Pues le terminó flasheando las dos teclas al mismo tiempo y el güey me dejó pasar tranquilamente. Once again, repito, there are worse fates than death, y lo que sigue a conitnuación es el ejemplo perfectísimo de esa frase.
Entramos y por todos lados había viejas y vatos encuerados de lo más normal. O sea, no es que me quiera poner exigente, pero por qué siempre en lugares nudistas hay puro pinche feo? Es mucho pedir que de menos haya un güey y una tipa sabrosos para poder distraerte un poco entre tanto pellejo guango? Am I reaching for the stars? A Ragini le valió madre y se quitó todo en chinga. Anelise tampoco se quedó atrás y se encueró igual. Yo me quedé solo viendo al sol a ver si Diorsito me hace un milagrito, o ya de perdida me deja ciego.
De repente un negro medio buenorro se acerca y comienza a tirarle el pedo a Ane y ella puestísima. El tipo le decía que se fueran a coger y la chingada y ella bien lista para saltarse el ‘Wine me, dine me’ e irse directo al ’69 me’. Ragini se mega enceló, y se acercó al negro también. Entonces empezó una competencia mega bizarra en la que las dos se están tocando los senos de la manera más puerca ever. Fue tanto el show que pensé que se andaban haciendo el tacto.
Lo más cagado de la situación es que con todo y la competencia de quién tocaba mejor el piano (you know, por las teclas), el negro jamás peló a Ragini y se lanzó directo por Anelise. Ya andaban quedando para irse a culear cuando Anelise le dice que tiene que pedirle permiso a su esposo. Gurl, you serious right now? Por un lado, qué pinche fastidio lo que hizo nada más para sentirse una strong and independent woman who don’t need no man. Por otro lado, qué bueno porque ya la veía invitándolo a coger en nuestra habitación.
Esa noche nos fuimos a empedar durísimo. Primero en un restaurante, luego en un chippendale en donde confundieron al esposo de la hermana de Ragini – que estoy seguro tiene retraso mental o de plano nada más está muy pendeja – con unos de los bailarines, y después en un antro donde todo mundo ya estaba hasta el huevísimo. Lo más intenso fue cuando nos subíamos al taxi porque Ragini odiaba a Adam y se la pasaba diciéndole a Radhika que por qué se casaba con él (válido), que she could do better (cierto), que el tipo era un controlador (verdad), y que todavía podía arrepentirse (if only). Muy awkward la situación porque todos, incluso el taxista, estábamos escuchando la conversación. Creo que en un momento hasta le preguntó al taxista por su opinión. Una cosa esplendorosa, honestamente.
Al final de la peda me tocó regresarme con Anelise y ahí sí se puso terrorífica la cosa. De que la vieja iba bien peda y sacó la cabeza por la ventana. Yo bien inocente pensando que estaba viendo el strip porque justo estábamos pasando por todos los hoteles y el taxista me hizo saber muy amablemente (not) que estaba vomitando machín. OK? Empezó a cagotearme mientras nos conducía a nuestro hotel y Anelise decidió ponerse al tiro. O sea mamita, estamos en los Disparos Unidos, me van a hacer el hoyo más grande a puro balazo po tu pinche culpa, por favor cállate.
Cuando nos vamos acercando al hotel, el cabrón se estaciona en una calle oscura y ahí sí me sudó cabrón. Yo ya me veía como otro número en la estadística de muertes por armas de fuego. El tipo se baja, ve la puerta por fuera toda vomitada y comienza a gritar. Me dice que cómo chingados le permito a mi hermana (she’s not) comportarse así, que ella es mi responsabilidad, que ya ni la chingo. Yo así de… ma’am, mi “hermana” tiene más de 30 años, está casada y tiene dos hijos, she can take care of herself.
Pues casi me madrea.
El güey me dice que cuánto le voy a dar para que vaya a lavar su coche. Veo el taxímetro, son 10 dólares de viaje, pues yo muy amable le doy 5 dólares más por la molestia. Me sentía más magnánimo que Lady Di visitando a las víctimas de campos minados. Teresa de Calcuta se habría quedado pendeja con mi bondad. De que le di los billetes y lo observaba por el retrovisor porque esperaba una sonrisa, una disculpa, y tal vez una o dos lágrimas de gratitud.
Pues ahí sí casi me putea.
Alguien sabía que lavar un coche en Disparos Unidos no cuesta 5 dólares? Because I didn’t.
El cabrón comenzó a gritarme, me dice que me baje del coche (yo ya me veía volviendo a Canadá en ataúd), que soy un sanababish y la chingada. Literal, casi me agarra a madrazos y Anelise diciéndome que me apurara para seguir la peda. En fin, no morí, but again, there are fates worse than death. Anelise peda y meando con la puerta abierta mientras me contaba todo de su vida es un perfecto ejemplo de esto.
En resumen, sobreviví, pero a qué precio?