So volviendo a marzo. Pues fue mi cumpleaños y como para variar cuando hay más ánimo para festejarlo siempre es día muerto para los antros y la buena vida nocturna, terminé yendo al templo – Emporium Galorium – para una buena ronda de shots y cervezas y acabarme la vida un poco más, por qué no? Eso sí. Primero una amiga francesa me ofreció su depa para hacer una fiesta ahí. Fuimos todos los mexicanos, yo con mi botellita de champagne, obsequio de mi queridísima drinking buddy y bitch number one, Malin. Agarramos la peda y de ahí al Emporium. Bueno, pues salí tirado de ahí, Matt y Jordan – dos canadienses que vivían en el mismo piso – me llevaron arrastrando al cuarto y tuve una conversación muy Hit Bottom a altas horas de la madrugada:
Matt: He’s wasted.
Jordan: Hey, man, do you need help?
Mauuu!: No, I can do it. *struggles to open the door*
[Some more minutes of intense struggling]
Mauuu!: OK, yes.
Indeed. Epic Failure para abrir la puerta de mi cuarto. Well, I was beyond hammered and fucking French doors weren’t making it any easier! Al día siguiente fui a clase a las 9 de la mañana, siempre súper crudo pero perseverante. Me disculpé con mi amiguito francés porque siempre me veía todo shaky y pale y fui con María a comer. Ese día era el Running Dinner. Onda de que los franceses se reunían en casas y cocinaban el aperitivo, el plato fuerte y el postre para los estudiantes internacionales, meaning que si son tres platillos, llegabas con tu equipo, comías la ensalada ahí, te movías a la siguiente casa para el plato principal y después a una tercera para el postre. Al final todos teníamos que terminar en un bar irlandés para continuar la peda ahí.
Qu’est-ce que fuck? Cómo que continuar la peda? Well, pues es que nosotros éramos los encargados de llevar la bebida. And enough’s been said. La primera casa fue con los alternos. Onda todos en teatro y danza y música y la mamada y nosotros así de… I hope the salad is good. Así sería un poco tolerable el calvario. Pues pura lechuguita y quesito de cabra. *rolls eyes* La segunda casa, según Google Maps quedaba en otro distrito de Francia. OMG, el caos! Pues sufriendo horas bajo el clima ever so changing Rouenais hasta que las viejas de la segunda casa deciden hablarnos y decirnos que está mal la dirección y que en verdad está a dos minutos de la Gare.
Sí. Eso fue comfort por un segundo. Pero para nosotros que recorríamos esas calles todas las noches, sabíamos que no era un gran relief. Especialmente cuando tienes que franquear hileras de prostitutas – most of them transexuals. Now, I don’t have a problem with hookers, I mean, I talk to Monikirie on a regular basis. Pero chicks with dicks. I’m sorry, I know I’m queer, pero eso no significa que deba aceptarlo todo. Y “mujeres” con antena es definitivamente un no – A HUGE NO. Tan huge que ni el Caps Lock logra describirlo remotamente.
Y es que… cabrón! Te ofrecían todo el repertorio en francés. Te oían que hablabas inglés y te lo soltaban en ese idioma (an extremely rare trait for French people in general – ni hablar de una ciudad tan poco frecuentada como Rouen). Ah! Pero iba con unas amigas de Monterrey, y uno pensando, a ver cabrones, denle en español. Pues jodido yo si creía que eso iba a detenerlos. Si hablaban mejor que yo los mother fuckers! Dios mío, pues claramente pasamos en putiza y con las piernas muy cerraditas para protegernos bien, porque en un descuido el Evil Eye es lo que menos debía preocuparte.
En el platillo fuerte tragué como bestia, pero es que sólo así me evitaba de hacer comentarios incómodos, muy ciertos pero incómodos. Y es que eran de hueva! No bebían, no tenían conversación, ay no, he deseado morir muchas veces (como ahora en mi primera semana de vuelta en el PuT**) pero como esa vez, pocas. Al fin, llegó la hora de irnos a la última casa por el dessert, but nothing in my life prepared me for such a… ahem, dessert.
Evidentemente, no eran expertos culinarios. El “pastel” parecía horneado con manteca en vez de levadura. I mean, seriously, if you’re gonna show your ass to the world, work out. Y si creen que eso fue todo, la cereza del pastel fue cuando comenzó a dedearse, impacto magnificado al hacerlo con toda la acción hacia el público. Now that’s a professional.
Verán. Cuando llegamos estos weyes ya estaban pedísimos. Total que jugamos unos drinking games para variar, en los que acabamos todos aún peor. Yeah, yeah, yeah, lo usual, pero el “platillo” en cuestión estaba out of it. Una cosa es ponerse una peda linda, sabrosa, vagamente memorable (blackout = éxito) y salir de pie del lugar. O en mi caso, salir en brazos del Bodyguard de la noche, onda Whitney Houston. Pero siempre sin enseñar más allá del elástico de mis Calvin Klein. Eso, para ustedes, es salir victorioso. Clearly los franceses no conocen ese término.
But the worst was yet to come.
Bueno, yo estaba en shock! I mean, después de que el wey comenzó a jerk offearse, yo así de, “Por amor a Dior, no quiero ver otra polla en mi vida!” o.O y es que estaba tan pero tan pero tan tan tan delgadita y chiquita… Mi directora una vez dijo que todo en chiquito se veía más bonito, pero frankly, I was grossed out. Decepcionadísimo de la vida! Caray, uno que leyó las estadísticas antes de escoger el país al cual infectar, llega súper confiado pensando en 16.7 cms average y le dan eso, JODER! Pero poco sabía yo que ese era la primera polla de aquella noche.
Eventualmente dejamos a ese cabrón con su vecino el drogadicto. Nos fuimos al bar con los franceses. Me encontré a todos los del intercambio en sus respectivos grados de peda. Todo súper cool, yo con los franceses chismeando feliz de la vida y… Dick #2 came along. Pues total que no había baños y aunque hubiera… If there’s something you should know about France is: It’s never water. Es el paraíso para los adeptos al Golden Shower! Cualquier charco que veas, siempre es de alguien que estuvo ahí cinco minutos antes que tú. Total que el wey se sacudió por toda la calle, pero después de la decepción, ya sólo sentía un vacío en mi alma. But God came to the rescue. This one was so much better. Aún no daba el ancho (by all means really think of that last word through) pero ya iba en vías de mejorar.
Y luego, el savior! Uno de los franceses hasta el huevo apuesta a que puede escribir su nombre en orina y todos como animales vitoreándolo. My God, that was quite a sight. A very, very, very pleasant one. Gracias a Dior se llamaba Romain el cabrón porque sino no lo hubiera logrado. I mean, la R no hubo pedo. La O, tampoco. M y A sin problemas pero apenas llegó a la I, it was time to refill. Ya no tenía ni para el puntito. Pues ahí van los otros pendejos con más chupe para que terminara antes de que se secara. En fin, prueba superada!
Por supuesto que toda esta anécota fue más cagada cuando me di cuenta que el chico Gourmet llevaba clases conmigo. Let’s think of extorsion, but better. Claro que eso tenía que esperar hasta la siguiente semana, cuando comenzaban los terribles examenes finales. Claro. Siempre son temidos esos putos exámenes, pero al pavor habitual agreguenle que de tus ocho clases por materia, fuiste a cinco, tres en estado de congestión alcohólica y las otras dos completamente spaced out. Yeah, it was fucking horrible.
De cualquier forma, fuck them, la siguiente semana eran los cumpleaños de Jordan y Vicki y yo ni en pedo me los iba a perder por un examen, let alone tres. El 11 de marzo fue el de Vicki y, antes de ponernos el pedo de nuestra vida, ella y yo prometimos que amaneceríamos en un hospital francés para ver a todo el cuerpo médico. *drools D’d style* Obviamente esa noche salimos hechos concha! Joder, tuvimos que cargar a Vicki upstairs cuando nosotros nos íbamos arrastrando por las paredes junto con ella. Ni hablar que el día siguiente amanecí hecho mierda completamente, la primera vez que mis insides salieron a ver la luz del sol una vez digeridas. So classy.
Bullchic! Ese día era el cumpleaños de Jordan pero todos estábamos en serios problemas, mainly with our respective livers. Ni hablar, unas cinco, seis, siete u ocho cervezas y ya, no más! Mil conscientes, obvio! Debía mantenerme fuerte y sano y sobrio porque esa semana viajaba a Dublín para el Saint Patrick’s Day y ahí, fuck los Leperchauns, las hadas, los celtas, Charmed, la mamada, no no no… La cerveza Guinness!
Onda que me quedé con unos españoles que yo no sé cómo carajo se atreven a irse a un país extranjero sin hablar el idioma. Es que, joder, en verdad, OK, mi francés no era precisamente lo más hermoso cuando llegue a Francia pero no me jodan, al menos sabía preguntar por los aseos! Estos cabrones ni en pedo. Bueno, estaba fucked sideways. Que eso sí no me impidió agarrar unas pedas terroríficas. Onda de que dije, “de aquí no soy” y me salí al antro. Very bad idea, by the way.
Picture this: Yo sentado en la barra, con una Guinness y de repente volteo y a mi lado un cabrón de 60 años! Y me hace la charla y yo muriendo por dentro. Total que lo corto, me volteo para el otro lado y… Sandwich! OMG, pero ambos panes estaban rancios! Like, fucking seriously. Y yo, “Oh My God, what did I do wrong!” El horror! Total que me salí, me fui a la pista y en eso, canción Europa 2008: Don’t Stop the Music. Pues yo ya andaba trepado en las bocinas, en el chisme, haciendo amigos de peda, la chingada, buenísimo! Definitivamente Dublín es LA ONDA para el antro gay, lo amé, lo amé, lo amé, lo amé, lo amé. Well, dejé de apreciarlo un poco cuando a mi lado comenzaron a repartir blowjobs… Gente, que soy mil impresionable!
Total que me salí y estaba lloviendo torrencialmente y ningún puto taxi me recogía porque sólo era una persona! Like, I mean, seriously? Porque sí, sólo yo iba a tomar el taxi, pero yo soy tan grande, tan magnífico, tan bello y agradable (y sencillo) que con eso tenían y sobraba! Y si no era eso suficiente, mi magnificencia era aún mayor porque iba vestido como vil puta, or should I say “desvestido”? Hmmm… pensándolo bien, maybe that’s why they didn’t pick me up in the first place…
Eventualmente logré llegar a casa – the means by which I got there will remain a secret.
El día del desfile estaba desde las 9h ya en la calle bebiendo con unos mexicanos que encontré. Después tapón en un bar cercano. Después tapón en otro. Después destapándonos en un after… Bueno, Irlanda es la opción para básicamente cualquier alcohólico pudiente – because it is expensive.
De regreso a Rouen, comenzaban las nuevas clases, nada cool, nada relevante, francamente mega de hueva, pero perfecto porque apenas volví ya empacaba para Amsterdam…
De nuevo.